Cierto es
que la pesca de la carpa este año en el Pantano de Alarcón ha sido muy
agradecida conmigo, pero también cierto que ha sido muy difícil acercar a los
peces a la orilla. Un par de grandísimo días a enchufable, uno de ellos
memorable, pero era echar la caña de coup de 9 metros para
poder hacer algún documento videográfico del evento y me era totalmente
imposible cebar a los ciprínidos a tiro de la misma. Claro, que siempre me
llevaba la de inglesa, y en cuanto no tenía resultados probaba con ésta que era
la que este año nunca ha fallado. ¿Qué problema había? Seguramente de
insistencia, así que, y pese lo avanzado de las fechas para tentar a las carpas
en este pantano, ya que en el mismo abandonan la cercanía de las orillas muchísimo
antes que en otros escenarios, me propuse completar una jornada entera al coup
con este tipo de caña, así que solo me llevé a la misma para evitar caer de
nuevo en la tentación de “la inglesa”.
Así que,
acerté, ya que sin hacer una gran pescata sí conseguí el objetivo de grabar
esta modalidad de pesca, la cual ocupa en mi clasificación de esta actividad la segunda posición de mis preferencias, tras
la pesca
a inglesa y precediendo a la enchufable y la pesca a fondo con cebador
o feeder
agreste.
Resumiendo la
jornada: clavé 23 carpas, escapándoseme después de una enconada lucha 5 y rompiéndome
4 (las dos primeras el bajo del 0,18, lo que me hizo cambiar a bajos del mismo grosor
que la línea, es decir, 0,205, partiendo en este caso la línea debido, seguramente,
al estar más deteriorada por el tiempo que lleva montada y por haber llevado alguna
que otra jornada con el mismo aparejo), dado el empuje y la potencia de los
bichos y que el elástico era algo duro. De todos modos, objetivo cumplido: pude
pesar 14 royales (19 kilos) e inmortalizarlas en un, creo, digno vídeo, que es
de lo que se trataba.
Comentarios